Somos
partículas
unidas por
hilos frágiles
Exiliadas
del puerto
aventuradas
mar adentro
Ilusión o
religión
creamos un
destino de encuentro
Donde esas
piezas encajan
donde sus
señales
evocan complicidades
añoradas
Bahía donde
lo roto
consigue
reparación
Amarra para
morar
como si fuésemos
eternos
Un instante
la vida en fracciones o no
Perdimos el
rumbo
brújulas trazos
incompletos
Hay quien
creyó
que había que
sufrir
para llegar
a destino
Otro se esforzó
aprendió a navegar
pero nunca
alcanza tierra firme
Alguien podrá
decirnos
quién es
más feliz
el
sufriente que llega
o el
artesano que acompaña la marea
Es azaroso
el camino
como
efímera la vida
Aún del
dolor
es
necesario aprender
Si queremos acceder a ese lugar
que no está
al final
de ninguna
travesía
Deberíamos aceptarnos
fragmentados
Sabernos piedras
sueltas
que alguna
vez se unen
se
abrazan y beben
Hasta que
el amanecer
nos sorprenda
dispersos en la arena
PINTURA SOBRE PIEDRAS MARINAS
LENA SCHNEIDER
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